17 locales de ocio nocturno de Valencia, entre ellos la mítica discoteca La3, que se ha visto obligada a cerrar definitivamente por falta de ayudas, reclaman responsabilidad patrimonial al Estado

Después de 9 meses de abandono, estos locales registraron ayer reclamaciones por valor de 1,5ME a través de la Plataforma de Empresarios Afectados por el Covid19 (PEACovid-19).

En fecha de ayer, 17 locales de ocio nocturno de la Comunidad Valenciana, asociados a la Asociación de Discotecas de Valencia, a la Federación de Hostelería de Valencia (Hosteleria de Valencia) y a la patronal estatal SPAIN NIGHTLIFE presentaron a través del Registro Electrónico General de la Administración del Estado, reclamaciones de responsabilidad patrimonial contra el Estado Español, reclamándole un importe total de 1,5 ME. Entre las discotecas que han presentado una de estas reclamaciones, se encuentra la mítica discoteca La3, la cual se ha visto obligada a cerrar definitivamente debido a que no ha podido soportar las consecuencias derivadas de las restricciones impuestas sin haber recibido ninguna ayuda por parte de la administración. Esta conocida sala, que contaba con 10 años de historia, era un referente del sector a nivel nacional e internacional y por la misma habían pasado DJs y productores como Jeff Mills, Nina Kraviz, Laurent Garnier, Seth Troxler, 2manydj’s, Vitalic y Flux Pavilion, entre muchos otros.

Los empresarios reclamantes han tomado esta medida obligados por la situación límite a la que se han visto sometidos. Cabe recordar que el ocio nocturno en la Comunitat Valenciana se cerró en su totalidad el pasado 14 de marzo (debido al estado de alarma decretado desde el Gobierno Central y posteriormente tras decisión de la Generalitat Valenciana), en junio volvieron a reabrir pero el 17 de agosto tuvieron que volver a cerrar, y no fue hasta el  pasado 10 de diciembre que se habilitó su apertura en formato restauración, algo inviable económicamente para muchas de ellas después de acumular pérdidas millonarias. En todo caso, cabe decir que los pocos días que les permitieron abrir en verano fue con aforos muy reducidos por lo que muchos de ellos ni tan siquiera reabrieron al no salirles a cuenta ya que además, estaban obligados a invertir en compra de mobiliario y suministros higiénicos que finalmente no han servido para nada.

Una travesía de 9 meses por el desierto sin recibir ayudas

A pesar de haber estado más de nueve meses con los negocios cerrados o soportando restricciones desproporcionadas y arbitrarias, estas empresas no han recibido ningún plan de ayudas y, a pesar de ello, se han visto obligadas a seguir pagando impuestos, una parte de cotizaciones a la Seguridad Social y los alquileres mensuales, provocando todo ello el estrangulamiento financiero de las mismas y haciéndolas inviables. Tal y como explica Joaquim Boadas, secretario general de Spain Nightlife, “este abandono total de las empresas de ocio nocturno y de la hostelería en general es una irresponsabilidad total del gobierno, y por este motivo y por muchos otros que explicamos en las reclamaciones de responsabilidad patrimonial es por lo que hemos decidido reclamar contra la administración, a la cuál señalamos como responsable último de todas las pérdidas sufridas y de sus consecuencias, la cual deberá responder del lucro cesante, daño emergente y daño moral cuantificado y acreditado en las reclamaciones”.

Toda esta debacle ha derivado en un incremento exponencial del número de concursos de acreedores presentados durante los últimos meses, aunque muchos de ellos todavía no lo han presentado pese a encontrarse en situación de insolvencia, y ello por cuanto el Gobierno Central recientemente aprobó una moratoria para su presentación hasta el día 14 de marzo de 2021, lo que a criterio de Manuel Espinar, presidente de la Federación de Hostelería de Valencia (Hosteleria de Valencia) y de la Confederación de Hostelería y Turismo de la Comunitat Valenciana  (CONHOSTUR), “es una medida tan solo de caras a la galería que únicamente servirá para retrasar la muerte de las empresas, alargando su agonía, pues lo que debería de haber hecho el Gobierno es aprobar ayudas económicas directas y suspender el pago de tributos, cotizaciones a la Seguridad Social y el 100% de los alquileres, pues el resto de medidas no sirven para nada sin medidas eficientes.”

Por su parte, José Luis Benítez, presidente de SPAIN NIGHTLIFE y portavoz de la Asociación Ocio de Ibiza se ha mostrado abierto a dialogar con la Administración y ha defendido que lo primero es la salud de las personas pero ha recordado a la Administración que “sin economía no hay salud y que, si las empresas cierran debido a la falta de ayudas, cuando los trabajadores se quieran reincorporar de los ERTES, ya no lo podrán hacer porque las empresas habrán desaparecido, lo cual provocará un daño irreversible a la oferta turística de nuestro país”

Por todos estos motivos, las empresas de ocio nocturno reclamantes consideran que la administración debe de compensarles económicamente por el tiempo que han estado cerrados y, en el caso de las que se han visto obligadas a cerrar definitivamente, por las consecuencias derivadas del mismo.

Las reclamaciones patrimoniales se multiplicarán en los próximos días

Estas 17 reclamaciones, que en los próximos días se convertirán en muchas más y que se ampliarán a las respectivas Comunidades Autónomas, se han canalizado a través del convenio firmado en su día entre la patronal nacional de ocio nocturno SPAIN NIGHTLIFE, y la Plataforma de Empresarios Afectados por el Covid19 (PEACovid-19), plataforma que representa a autónomos, pymes y grandes empresas de toda España y a la que se han sumado empresas de diferentes sectores como hostelería, taxis, comercio, cultura, entre otros.

En caso de no prosperar las reclamaciones previas interpuestas, se procederá a presentar el correspondiente recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Supremo, ya sea contra la desestimación presunta o bien contra la resolución expresa que en su caso recayera.

Para más información, pueden dirigirse a los teléfonos 647 494 306 o 670 703 370.